Introducción

Se trata de una naranja rústica, robusta, de sabor muy dulce, mucho jugo y con pipos. La cáscara es de grosor intermedio y se pela fácilmente. La maduración es más tardía que la de la variedad Washintong, que se ha puesto en la zona después. Se recogen desde noviembre o diciembre hasta mayo-junio. Los naranajos que las producen son árboles centenarios posiblemente injertados sobre Poncirus trifoliata, de unos 10-12 m de altura, y con presencia de pinchos largos (8-10 cm) en las ramas, lo que dificulta su recolección. Las naranjas se ven sobre todo afectadas por las granizadas y las heladas; respecto a otros factores adversos son muy resistentes.

Territorio de producción

ORIGEN

Autóctona.

DIFUSIÓN EN EL TERRITORIO

Se localiza, dentro de la provincia de Cáceres, en el centro-sur de la misma, lindando con la provincia de Badajoz: en el término municipal de Alcuéscar, perteneciente a la comarca de la Sierra de Montánchez-Tamuja, principalmente en los valles de la zona entre la Sierra del Centinela y el Trampal.

ÁMBITO PAISAJÍSTICO

Sierras medias.

PARTICULARIDADES DEL ECOSISTEMA

Alcuéscar se encuentra en la falda sur de la Sierra de Montánchez, que marca la frontera entre las provincias de Cáceres y de Badajoz haciendo, además, de divisoria de aguas entre las cuencas del río Tajo y del Guadiana. Estas sierras de altitud modesta que discurren de este a oeste en el centro de Extremadura presentan dos vertientes: una suave y de gran extensión orientada hacia el norte y otra, la vertiente sur, con mayor desnivel y de terreno accidentado. Los piedemontes de estas elevaciones dan lugar a un terreno a base de rañas surgidas de la acumulación de las rocas que, apeadas de las crestas por la erosión, fueron poco a poco rellenando los valles de suelos rojizos ricos en materiales silíceos mucho más pobres en las solanas que en las umbrías. Los fondos de los valles presentan suelos más propicios para el cultivo de huertos y árboles frutales, formando un mosaico de colores y ambientes diferentes.

CAPACIDAD PRODUCTIVA

El éxodo rural ha conducido al abandono generalizado de las fincas agrarias, de manera que cada vez hay menos productores, apenas hay relevo generacional (solo hay un joven dispuesto a recuperarlos), y los terrenos en que hay naranjos están muy descuidados, deteriorándose y llegando a morir los árboles. En total quedan unos 6 o 7 productores, pero no está organizados como comunidad. La producción, por tanto, es cada vez más escasa y no está tan valorada como antiguamente.

Relación con la comunidad

CÓMO SE PRODUCE

Al crecer en zonas con abundante agua en el subsuelo, estos árboles no se riegan. Tradicionalmente se hacía un manejo más próximo a lo agroecológico, pero un asesoramiento productivista durante décadas mal enfocado, ha llevado a que algunos productores hayan dejado de desbrozar y usar estiércol o gallinaza mezclada con los restos de poda del olivar circundante, y utilicen herbicidas y abonos químicos nitrogenado.

La poda la hace cada productor en sus naranjos a principios de agosto, quemando los restos en épocas de menor peligro de incendios. es una operación compleja, pues los árboles tienen ramas altas y gruesas, y cada vez hay menos gente que conozca la técnica apropiada. La reproducción puede realizarse mediante semillas (pues no hay hibridación) o por estacas; sin embargo, en la actualidad apenas se reproducen y sólo se conservan ejemplares de edad avanzada.

El manejo predominante les hace más vulnerables a los ataques de la mosca de la fruta y la cochinilla.

USOS GASTRONÓMICOS, CONSERVACIÓN Y CONSUMO

Es típico por esta zona la ensalada de naranjas, con azúcar, aceite de oliva y algunas personas también aderezan con pimentón. Por otro lado, por el dulce y agradable sabor de las naranjas, el zumo natural es especialmente apreciado.
Se consume únicamente en Alcuéscar y los pueblos de alrededor. Es muy apreciada por los vecinos, se vende entre ellos fuera de cualquier establecimiento.

HISTORIA Y EVOLUCIÓN DEL PRODUCTO

Son árboles centenarios que, más allá del deterioro que vienen sufriendo por el abandono progresivo de la actividad agraria, no han sufrido drásticos cambios en su manejo, salvo la incorporación en algunos casos del uso de herbicidas, abonos químicos y otros productos fitosanitarios. No se ha detectado un cambio significativo en las cualidades organolépticas de las naranajas.

TRADICIONES Y PATRIMONIO MATERIAL

Queda ya en el recuerdo de los vecinos la época en que los productores dejaban un cubo en la puerta de sus casas para anunciar que ya tenían naranjas.
Los conocimientos de poda de cítricos de los agricultores mayores son un tesoro que hay que preservar pues, sin ellos, estos árboles centenarios tendrían los días contados.

Ligada a la antigüedad de los naranjos, existe una historia que cuenta que la Reina de Inglaterra gustaba mucho de la fruta de este pueblo. Esta fue una zona de asentamiento de las tropas inglesas durante la guerra de la independencia frente a la ocupación francesa. Más tarde, esas tropas llevaron las naranjas a Inglaterra, de donde surge dicha historia de que fueran tan demandadas en el palacio de Buckinham. También cuentan que a Franco le gustaban mucho, y mandaba a un cocinero a buscarlas.

En un intento por poner en valor este producto se realizó la Fiesta de la naranja en 2006 y 2007.

RIESGO DE DESAPARICIÓN

Esta en riesgo de desaparición, pues cada vez hay menos productores y se está abandonando la actividad agraria en el medio rural extremeño. Por otra parte, las naranjas que ahora se consumen en el pueblo y los alrededores llegan de fuera, dejando a las de Alcuéscar fuera de los circuitos habituales del comercio local.