El proyecto Ecosistema Slow: alianzas para la configuración de un entorno alimentario Slow en Extremadura fue una iniciativa cívica desarrollada por Slow Food Extremadura en el año 2017 que buscó generar alianzas entre la sociedad civil, las administraciones públicas y el tejido empresarial para configurar un entorno de trabajo dinámico, colaborativo e inclusivo en relación con la alimentación sostenible en Extremadura a través de la promoción de la producción de alimentos y manejo del territorio sostenibles, el consumo de proximidad y la comercialización y el intercambio responsables. El proyecto contó con el apoyo de las Diputaciones de Cáceres y Badajoz, FEVAL, la Junta de Extremadura, REDEX, Horno Activo, el Clúster de Artesanía Alimentaria, REDEX y CivicWise Extremadura.
Inicialmente se planteó que el EcosistemaSlow afrontara los siguientes retos:
- Generar un modelo alimentario y de gestión y manejo de recursos propio que pueda tener cabida de pleno derecho en la PAC 2020.
- Incidir en la legislación autonómica para permitir procesos de producción y consumo más sostenibles como el canal corto, el consumo de proximidad, etc…
- Comenzar y perseverar en un proceso de transición desde el estado actual de las cosas hacia un nuevo paradigma.
- Poner en valor la diversidad y el potencial de los diversos territorios así como incrementar el orgullo de pertenencia hacia los mismos.
- Generar y generalizar una cultura del “buen alimento”, el alojamiento y la estancia sostenible y el consumo de proximidad.
- Recuperar de la tradición y la cultura popular asociada a la gastronomía en Extremadura.
- Conectar y dar a conocer productores, restauradores, consumidores ya sea del ámbito profesional como doméstico, así como otros agentes que potencialmente pueden pertenecer al EcosistemaSlow.
- Incidir positivamente en la sociedad a través de la comunicación y la divulgación, con especial énfasis sobre el sistema educativo.
La primera fase del proyecto consistió en el diseño de un modelo horizontal de gobernanza para el Ecosistema Slow donde diferentes agentes decidieron las “reglas de juego” que debían regir el proceso de cambio en el modelo alimentario extremeño.
Para ello, Slow Food Extremadura convocó a iniciativas relacionadas con la alimentación sostenible en los planos nacional (Foodtopía, CERAI, UOC, Restaurantes Sostenibles y Slow Food España), internacional (Slow Food Internacional y Terrius) y una larga lista de iniciativas locales entre las que encontramos pequeños productores, pymes, cooperativas, la Universidad de Extremadura y movimientos sociales.
En torno a una mesa de trabajo se validó el proceso estableciendo diferentes y fundamentales pilares sobre los que sustentar el proceso: filosofía, comunidad de personas, itinerario de transición, educación y producción sostenible.
Seguidamente se implementó la segunda fase consistente en la realización de un Encuentro Abierto del Ecosistema Slow, llevado a cabo el 8 de junio de 2017 el en el CID I-Novo de Trujillo. En él, más de 40 personas (pequeños productores, pymes, cooperativas, movimientos sociales, representantes y técnicos de la Administración, investigadores, docentes, así como, personas a título individual interesadas en formar parte del “Ecosistema”) a través de grupos de trabajo y sesiones plenarias, validaron la estrategia propuesta, el modelo de gestión/gobernanza y los retos detectados para, posteriormente, realizar una primera concreción de iniciativas, proyectos, acciones y equipos de trabajo que asuman el liderazgo, desarrollo y viabilidad de las mismas.
